Dos días hicieron falta para dejar todo como antes. El primer día desescombraron, retirando las pesadas piedras. Tuvieron que descender a la acequia con cuerdas para poder retirarlas. Ahí estuvieron, desde las diez hasta la una y al día siguiente igual. Al día siguiente fueron para arreglar la barandilla y el escalón entre Antonio, Jesús y Juanjo. Gracias a todos los voluntariosos; el primer día estuvieron ayudando: José Luis Latorre, Miguel Aznar, Javier Vives, Salvador y su cuñado Manolo Belenguer, Mariano, Juanjo y José Manuel Aldea.
Gracias a todos los que han reparado los daños en el camino y una de las escaleras que hay camino de El Hocino.